
Quienes leyeron la nota, sabrán que el GDF enfrenta unos cuantos miles de juicios, que se han amontonado desde tiempos de la administración priista. Burocrátas al fin, dice la ciudadanía, sin importar colores.

Qué ardores tan canijos. Pues con la novedá de que el Marcelito tiene un carnal de lujo: el secretario de Hacienda de Salinas. Sí, ese mero. El buen Pedro Aspe está por demás bien cuidadito, cobrando unos cien mil pesitos al mes en el GDF. ¡Yo también quiero ser carnala de izquierda progre!...o más bien retro.